Damasco.- Tropas del gobierno sirio recuperaron el control de la principal fuente de agua de Damasco, según dijeron el sábado la televisora estatal siria y la división de medios del ejército.
La noticia podría suponer el fin del pulso en el valle de Barada, que había restringido el flujo de agua para los casi 5 millones de habitantes de la capital durante cerca de un mes. Los combates atraparon a decenas de miles de civiles en la zona controlada por los rebeldes.
Las fuerzas del gobierno entraron en Ain el-Fijeh dentro de un acuerdo para poner fin a la violencia que persistía pese a un alto el fuego, indicó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un grupo opositor de monitoreo con sede en Gran Bretaña. El acuerdo también estipula que los rebeldes dejarán las armas o evacuarán la zona.
Los combates comenzaron por acusaciones del gobierno de que los rebeldes habían envenenado el agua en Ain el-Fijeh, una afirmación desmentida por los rebeldes.
Fuente:AP
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