sábado, 16 de marzo de 2019

Sube a 50 número de muertos en Nueva Zelanda por ataques terroristas;

Las autoridades neozelandesas informaron este sábado durante una conferencia de prensa que han encontrado otro cuerpo en una de las mezquitas que fue atacada, elevando a 50 el número de muertos en dos tiroteos en la ciudad de Christchurch.


El comisionado de policía de Nueva Zelanda, Mike Bush, agregó que 36 víctimas siguen hospitalizadas, dos de ellas en estado crítico.

Bush también aclaró que no se sospecha de las dos personas arrestadas el mismo día que el presunto atacante identificado como Brenton Harrison Tarrant.

Según el oficial, una de esas personas ha sido liberada y la otra ha sido acusada de delitos con armas de fuego.

"Esto solo puede ser descrito como un ataque terrorista", afirmó la primera ministra, Jacinda Ardern, en una comparecencia emitida en directo desde Wellington, la capital de Nueva Zelanda.

Ardern calificó los ataques de "extrema ideología" como "un acto de violencia extraordinario y sin precedentes" en lo que calificó como "uno de los días más negros de Nueva Zelanda", un país que es "abierto y diverso".
Brenton Tarrant, australiano de 28 años, es el presunto responsable de los ataques a la mezquita de Al Noor, cerca el Jardín Botánico, y a la aledaña Linwood, que dejaron 50 muertos y casi medio centenar de heridos, entre ellos menores, con lesiones que "oscilan entre graves a leves", según las autoridades sanitarias de Canterbury, la región donde se encuentra Christchurch.

Tarrant fue procesado el sábado en el primero de los muchos cargos de asesinato que se esperan.

"El hombre actualmente afronta un cargo de asesinato, pero obviamente formularemos otros más", dijo la primera ministra, Jacinda Ardern, en una rueda de prensa en Christchurch.

"Era su absoluta intención continuar con estos ataques" cuando fue detenido, añadió Ardern que calificó la masacre como un "ataque.

La oficina de la primera ministra confirmó que recibió de Tarrant por correo electrónico una copia del manifiesto en el que éste exponía su ideología extremista y justificaba su acción, menos de 10 minutos antes de que iniciara su asalto a la primera mezquita.

Tarrant retransmitió en vivo durante 17 minutos el brutal ataque en el que recargaba su arma semiautomática y acababa con sus víctimas sin piedad.

"Estamos horrorizados, consternados, indignados y condenamos absolutamente este ataque cometido hoy por un terrorista violento extremista de derechas", dijo el primer ministro de Australia, Scott Morrison, que mostró su solidaridad con el país vecino.

Las autoridades elevaron la alerta al máximo nivel y la policía tuvo que explosionar dos bolsas de forma controlada en Auckland, en la Isla Norte, halladas en una estación de tren, aunque finalmente solo contenían materiales.

Las fuerzas de seguridad han ordenado el cierre de todas las mezquitas del país por seguridad, mientras que los colegios y edificios públicos de Chrischurch, en la Isla Sur, también se encuentran clausurados.

La primera ministra confirmó que la seguridad ha sido elevada en todo el país, incluidas las fronteras, aunque los vuelos comerciales no se verán afectados.

El equipo de críquet de Bangladesh escapó ileso al tiroteo en una de las dos mezquitas porque "el ataque ocurrió antes de que llegaran al lugar", dijo a el director ejecutivo de la Junta de Críquet de Bangladesh, Nizamuddin Chowdhury.

"Nuestro equipo estaba de camino a la mezquita para celebrar la oración del viernes", añadió.

Las condenas a los brutales ataques se han sucedido inmediatamente, desde la primera ministra británica, Theresa May, al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, mientras que el jefe del Ejecutivo paquistaní, Imran Khan, culpó a la islamofobia.

"Culpo de estos ataques terroristas a la actual islamofobia", dijo Khan en su cuenta de Twitter, antes de asegurar que desde los ataques del 11-S en EEUU "1,300 millones de musulmanes han sido culpados colectivamente" por cualquier acto terrorista llevado a cabo por musulmanes.

"El terrorismo no tiene religión"

Nueva Zelanda sólo ha tenido un puñado de tiroteos masivos en su historia.
Fuente:EFE/AP


En corte detenido por masacre en Nueva Zelanda

Uno de los detenidos por los tiroteos contra dos mezquitas en Nueva Zelanda en los que murieron 49 personas compareció el sábado ante un tribunal al día siguiente de la masacre en la ciudad de Christchurch.

El sospechoso, identificado como Brenton Harrison Tarrant, un australiano de 28 años, ha sido imputado con un cargo de asesinato por la matanza, en la que también resultaron heridas de bala 48 personas, incluidos niños.

Las autoridades neozelandesas prevén imputar más cargos al detenido, al que el juez decretó prisión provisional hasta que comparezca de nuevo ante el tribunal el próximo 5 de abril.

El presunto autor, con ropa blanca de preso y con grilletes en las manos y los pies, hizo un gesto con las manos propio de los grupos de supremacía blanca flanqueado por dos policías en el tribunal del distrito de Christchurch.

Los ataques se produjeron a primera hora de la tarde en dos mezquitas situadas en el centro de Christchurch, la mayor ciudad de la Isla Sur del país, en el día del rezo musulmán del viernes.

Un total de 41 víctimas murieron en el tiroteo en la mezquita Al Noor, mientras que otros 7 fallecieron en la de Linwood y otra persona fue declarada muerta en el hospital.

La primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, que el viernes calificó los tiroteos como un "ataque terrorista", dijo el sábado que el acusado tenía dos fusiles semiautomáticos y dos escopetas con licencia y se comprometió a cambiar las leyes sobre tenencia de armas en el país.

"El individuo acusado de asesinato no llamó la atención de los servicios de inteligencia -ni de la policía- por extremismo", indicó la mandataria, quien agregó que tampoco tenía antecedentes penales.

Ardern también dijo que dos de las armas parecían haber sido modificadas y aseguró que el asaltante "tenía toda la intención de seguir con el ataque" cuando fue detenido.

De los otros tres detenidos el viernes, Ardern señaló que uno fue liberado sin cargos y que otros dos están siendo investigados por la policía.

La policía indicó que no busca a ningún otro sospechoso por los atentados, si bien no descartó que hubiera más personas implicadas, mientras que la primera ministra aseguró que el país mantiene el estado de alerta.

El atacante, con ropa militar, grabó durante 17 minutos la matanza en una de las mezquitas y lo retransmitió en directo en Facebook, donde se podía ver cómo disparaba a bocajarro contra numerosas personas y cambiaba al menos dos veces de cargador.

El supuesto responsable también colgó un manifiesto en las redes sociales con ideología extremista y proclamas contra los musulmanes los inmigrantes.
Fuente:EFE