Miami.- Grupos ambientalistas estadounidenses presentaron hoy una demanda en una corte federal contra el Servicio de Parques Nacionales (NPS) por autorizar la exploración de gas y petróleo en la reserva Big Cypress National Preserve, en Florida (EE.UU.).
La exploración, en más de 285 kilómetros cuadrados, pone en peligro de extinción de la pantera del estado de Florida, amenaza el abastecimiento de agua potable de la región y además tendría un impacto negativo en el turismo ecológico de la zona, cuestionaron los ambientalistas.
"Las compañías de petróleo y gas no tienen cabida en nuestros parques y reservas nacionales", aseguró Alison Kelly, abogada del Consejo de Defensa de Recursos Naturales, al anunciar el proceso legal.
Los grupos criticaron los permisos otorgados al principio del año por el NPS a la compañía petrolera Burnett, con sede en Texas, sin tener en cuenta el impacto ambiental que produciría en la reserva nacional, a 72 kilómetros al oeste de Miami (Florida).
Además del Consejo, la demanda fue presentada por el Centro para la Diversidad Biológica, la Asociación Nacional de Conservación de Parques, Conservación del Suroeste de Florida, Earthworks y la Asociación de Áreas Silvestres del Sur de Florida.
"El Gobierno federal debe proteger Big Cypress para el pueblo estadounidense y no permitir a una empresa de energía sucia transformarlo en una zona industrial", aseguró Kelly.
Según los demandantes, la reserva proporciona algunos de los últimos hábitat intactos para especies en peligro como la pantera de Florida, que es el mamífero más amenazado en el este de Estados Unidos, con menos de 180 de ellas en estado salvaje.
Señalaron que también es el hogar de otras especies amenazadas, incluyendo el murciélago de Florida, la serpiente índigo y la cigüeñas americana, entre otras.
Agregaron que esta exploración es "incompatible" con lo que es una reserva.
Según los ambientalistas, la superficie de Big Cypress National Preserve pertenece al Gobierno federal, mientras que la mayor parte de los minerales subterráneos es propiedad privada.
Los ecologistas temen que la exploración sísmica sería el primer paso en el desarrollo petrolero destructivo, que podría llevar a la perforación, la fracturación hidráulica o "fracking", entre otros procedimientos que causan impactos negativos para la vida silvestre, el hábitat y el agua.
Fuente:EFE