Económico, sostenible para el medioambiente, rápido, cómodo y totalmente eléctrico. Así es Alice, el avión de pasajeros fabricado por la compañía israelí Eviation Aircraft, y presentado en la última edición del Salón Aeronáutico de París, que podría redefinir el transporte aéreo regional.
Para cumplir con los pedidos de compra y las reservas, que comenzaron oficialmente en París, Eviation anunció que después de completar los vuelos de prueba en 2019 y la certificación del avión por parte de la Administración Federal de Aviación (FAA) en 2021, comenzará a fabricarlo en los Estados Unidos y a suministrar aeronaves para uso comercial en 2022.
“Estados Unidos es nuestro primer mercado objetivo y allí tiene su sede central nuestro primer cliente, la aerolínea regional Cape Air, pero estamos hablando con muchos países y empresas en este momento” señala a Efe, Caroline Venza, responsable de comunicación de Eviation (www.eviation.co).
Cape Air (www.capeair.com), una de las mayores aerolíneas regionales de Estados Unidos, incorporará los aviones Alice a su actual flota compuesta por 92 aviones de nueve plazas.
Actualmente en Estados Unidos se efectúan cada vez más viajes regionales y cada vez más pasajeros vuelan distancias de entre 80 y 1050 kilómetros.
Estos viajes registran un elevado tráfico alrededor del mundo, en rutas como la francesa París-Toulouse; la noruega Oslo-Trondheim: o la estadounidense San José-San Diego, según Eviation.
“Este segmento en crecimiento ofrece el escenario ideal para Alice, ya que las compañías aéreas regionales están obrando para reemplazar las costosas y anticuadas flotas con opciones eléctricas que reduzcan los costos de mantenimiento y operación, y este avión puede reducirlos hasta en un 70 por ciento”, apuntan.
El cambio a la propulsión eléctrica no solo reducirá los costes operativos, sino que además eliminará las emisiones de gases de efecto invernadero, hará que los viajes en avión de distancia intermedia sean más baratos, silenciosos y limpios, y conectará a las comunidades como nunca antes, adelanta esta compañía.
Con este avión, se ha reinventado la movilidad aérea con elegancia, e incorporando las últimas innovaciones en diseño de fuselajes, tecnología de baterías, integración de componentes eléctricos, materiales ligeros, gestión térmica, aterrizaje autónomo, eficiencia aerodinámica y estabilidad de vuelo, según Eviation.
“Capaz de operar a una fracción de los costos de los aviones de pasajeros convencionales, este avión ‘cero emisiones’ redefinirá la forma en que la gente viaja a nivel regional”, enfatiza Omer Bar-Yohay, director ejecutivo (CEO) de Eviation.
Más de mil kilómetros de autonomía
La actual versión de Alice, el Commuter 2022, se diseñó para cumplir la normativa de aviación estadounidense, y puede llevar a dos tripulantes y nueve pasajeros a 1.050 kilómetros de distancia, con una sola carga eléctrica, volando a una velocidad de crucero de 445 kilómetros por hora y a 10.000 metros de altitud.
Su cabina presurizada mide 12,2 metros de largo, sus alas miden 16,12 metros de punta a punta y tiene un peso máximo al despegue (aeronave, más pasajeros y carga) de 6,35 toneladas.
Alice está propulsado por tres motores eléctricos de 260 kilovatios (Kw) cada uno, alimentados por una batería de ion litio capaz de entregar 900 kW de electricidad por hora, con su propulsión distribuida en una hélice de empuje principal en la cola y dos hélices de empuje en las puntas de las alas, para reducir la resistencia y mejorar la eficiencia.
Esta propulsión distribuida también crea redundancia, es decir que ante un desperfecto en el funcionamiento de un equipo o sistemas, la aeronave dispone de otro que asume sus funciones, lo que en el caso de Alice, implica que el motor de cola sea capaz por si solo de hacer despegar o aterrizar el avión con seguridad si los de los de las alas sufren una emergencia.
Según su fabricante, su coste operativo es de unos 200 dólares estadounidenses por hora, y sus motores producen un bajo nivel de ruido y no producen emisiones contaminantes.
Por Ricardo Segura
Fuente:EFE