viernes, 24 de agosto de 2018

Consideran usar fondos federales para armas de fuego a maestros

El Departamento de Educación está considerando la posibilidad de permitirle a estados usar fondos federales para comprar armas que serían usadas como medida de seguridad en las escuelas, lo que ha provocado una lluvia de críticas.

El plan seguramente causará gran controversia, especialmente en estos momentos en que, tras una serie de masacres escolares en Estados Unidos, ha surgido un movimiento estudiantil a favor de que haya una mayor restricción a la compra, la tenencia y el uso de las armas.

El gobierno está examinando las leyes concernientes a la financiación federal de iniciativas educativas estatales a ver si el dinero puede usarse para comprar armas, dijo a la AP una fuente oficial que pidió no ser identificada.

Una ley educativa aprobada con apoyo bipartidista en el 2015 no prohíbe expresamente la compra de armas para escuelas, dijo el funcionario.

Agregó que el departamento ha recibido numerosas cartas y menajes pidiéndole que aclare para qué se pueden usar los fondos federales educativos.

La secretaria de Educación Betsy DeVos, titular de una comisión a cargo de estudiar maneras de mejorar la seguridad en las escuelas en el pasado se ha pronunciado a favor de darle a las escuelas la opción de darles pistolas a los maestros.

La comisión, creada a raíz de la masacre escolar en Parkland, Florida, ha sido criticada porque ni siquiera considera la opción de limitar la tenencia de armas.

La iniciativa, reportada inicialmente por el New York Times, suscitó fuertes críticas de demócratas, funcionarios del sector y activistas antiviolencia.

Acusaron al gobierno de Donald Trump de privar a los alumnos de asistencia psicológica y otros recursos, para favorecer a la Asociación Nacional del Rifle, cuyos miembros tienden a ser de derecha y apoyar a los republicanos.
Fuente:AP

Huracán Lane inunda Hawái y sigue acercándose a tierra

Expertos no anticipan al momento que el ojo del huracán toque tierra en las islas, pero sí se verán afectadas por las fuertes bandas de viento durante el viernes y gran parte del sábado. 

Se vaticina que se aproximará a las principales islas este viernes, trayendo peligrosas mareas de hasta 20 pies.

El huracán ya ha dejado fuertes lluvias y deslizamientos de tierra en algunas zonas de las islas.

El viernes chillaban las sirenas mientras los hoteles se protegían con sacos de arena y policías gritaban a los turistas para que se salieran de las playas ante la inminente llegada del huracán Lane.

La tormenta viraba hacia el norte con la mira puesta hacia la famosa playa de Waikiki después de arrojar dos pies de lluvia sobre la Isla Grande.

Cuadrillas de emergencia rescataron a cinco turistas de California de una casa en Hilo que se había inundado.

Los turistas que estaban en la casa narraron que un pequeño arroyo cercano subió de nivel súbitamente y abrumó la vivienda, que habían alquilado.

“Fue una tremenda experiencia porque no estaba en nuestros planes estar en un huracán en medio de nuestras vacaciones”, dijo Suzanne Demerais, una de las turistas, originaria de la zona de Los Ángeles.

Los bomberos se comunicaron con el dueño de la vivienda y decidieron evacuar a todos los ocupantes antes de que el agua subiera aun más. Los bomberos cargaron a los turistas sobre sus espaldas.

En Oahu, empleados del Hotel Sheraton Waikiki llenaban sacos de arenas para proteger el edificio de la marea cercana.

Varias tiendas en la Avenida Kalakaua de Waikiki colocaban sacos de arena en sus vitrinas, temiendo el impacto de la tormenta.

Por medio de altavoces, la policía llamó a los surfistas y a los nadadores a salirse del agua. La playa quedó cerrada hasta nuevo aviso.

El Marriott Resort Waikiki Beach en Honolulu designó el salón de fiestas en el tercer piso como refugio, y empezó a meter las sillas y mesas que estaban afuera frente a la piscina y el mar.
Fuente:Telemundo

Donald Trump enfrenta a Jeff Sessions y extremece la Casa Blanca

El presidente de EEUU, Donald Trump, agravó el jueves su enfrentamiento con el fiscal general estadounidense, Jeff Sessions, y advirtió de que los mercados financieros "se hundirían" si el Congreso abre un proceso de destitución en su contra, una posibilidad que por ahora parece remota.

Los nuevos ataques de Trump a Sessions, con quien mantiene una tensa relación desde hace más de un año, llegaron como un aparente síntoma de la incomodidad que le provoca el avance de la investigación sobre la trama rusa y la acusación de su exabogado, Michael Cohen, quien ha implicado al presidente en un crimen.

"Nombré a un fiscal general que nunca tomó el control del Departamento de Justicia. Es algo increíble", afirmó Trump durante una entrevista emitida por la cadena de televisión Fox News.

Trump ha expresado en numerosas ocasiones su frustración por la decisión de Sessions de apartarse de todo lo relacionado con la investigación sobre la trama rusa debido a sus propios contactos con Moscú, una medida que reduce la influencia del secretario de Justicia sobre la pesquisa del fiscal especial Robert Mueller.

"Jeff Sessions se apartó, algo que no debería haber hecho, o me lo debería haber dicho. Aceptó el trabajo y luego dijo, 'voy a apartarme (de la investigación sobre Rusia)'. ¿Qué tipo de hombre es ese?", denunció Trump.

"Por cierto, él estaba en mi campaña electoral. La única razón por la que le di el trabajo es porque sentía lealtad (de su parte). Me apoyaba desde el principio", añadió.

Sessions reaccionó unas horas más tarde, con un comunicado extraordinario para el titular de un departamento que históricamente no ha tenido que implicarse en debates políticos porque opera con independencia de la Casa Blanca.

"Mientras yo sea fiscal general, las acciones del Departamento de Justicia no serán influenciadas incorrectamente por consideraciones políticas", prometió Sessions en una nota difundida en Twitter.

El fiscal general respondió directamente a la acusación de Trump de que no ha tomado las riendas de su agencia, al afirmar: "Tomé el control del Departamento de Justicia el día uno en el que juré el cargo".

Poco antes de la respuesta de Sessions, un influyente senador republicano, Lindsey Graham, había pronosticado que el actual secretario de Justicia no durará mucho más en el puesto.

"El presidente tiene derecho a tener un fiscal general en el que confíe. Creo que llegará un momento, quizá más pronto que tarde, en el que será hora de una nueva cara en el Departamento de Justicia", dijo a los periodistas Graham, quien confió en que ese relevo se retrase hasta después de las elecciones legislativas de noviembre.

Si Trump sustituye a Sessions con un nuevo fiscal general, este podría tomar las riendas de la investigación de Mueller y mermarla o incluso despedir al fiscal especial, aunque el presidente lleva más de un año resistiéndose a tomar esa polémica medida.

En su entrevista con Fox News, Trump también reaccionó a las especulaciones sobre un eventual proceso de destitución en su contra a raíz de las acusaciones de Cohen, quien este martes dijo que el mandatario le pidió que pagara a dos mujeres para que no hablaran de sus supuestas relaciones con el entonces candidato republicano.

"Si se me sometiera a un proceso de destitución, los mercados (financieros) se hundirían. Creo que todo el mundo sería más pobre", afirmó Trump en la entrevista.

"No sé cómo se puede censurar a alguien que está haciendo un gran trabajo (...) Se verían números que no creerían, en retroceso (de abrirse el juicio político)", agregó.

Rudy Giuliani, abogado de Trump, también advirtió contra ese proceso durante una entrevista con el canal británico Sky News.

"Solo se le podría someter a un proceso de destitución por razones políticas, y el pueblo estadounidense se rebelaría contra eso", opinó Giuliani.

La oposición demócrata ha evitado dar alas por ahora a esa posibilidad, dado que, aunque el proceso se iniciaría en la Cámara Baja -que los progresistas confían en recuperar tras las elecciones de noviembre-, después se necesitarían dos tercios de los votos en el Senado para expulsar a Trump de la Casa Blanca, algo difícil.

Por otro lado, Trump reiteró sus elogios a su exjefe de campaña Paul Manafort, declarado culpable de fraude a raíz de la pesquisa rusa, y Giuliani desveló que el presidente ha pensado en concederle un indulto, pero sus abogados le han aconsejado no hacerlo hasta que acaben las investigaciones que le afectan.
Fuente:EFE