Washington.- Estados Unidos sancionó hoy a siete oligarcas y 17 funcionarios rusos, entre ellos el yerno del presidente Vladímir Putin, por promover la “desestabilización” global, en el mayor golpe hasta ahora del presidente, Donald Trump, contra la élite empresarial rusa.
Las sanciones también afectan a doce compañías supuestamente vinculadas con los oligarcas rusos y a la empresa estatal Rosoboronexport, la mayor exportadora rusa de armas que ha ganado millones de dólares con ventas al régimen de Bashar al Assad, según Human Rights Watch (HRW).
“Los oligarcas y las élites rusas que se aprovechan de este corrupto sistema ya no estarán aislados de las consecuencias de las actividades desestabilizadoras de su Gobierno”, afirmó Steven Mnuchin, secretario del Tesoro en un comunicado.
Mnuchin explicó que EE.UU. ha decidido sancionar a Rusia por sus “acciones perversas en todo el mundo”, entre las que citó la supuesta injerencia en las elecciones estadounidenses de 2016, la anexión de Crimea en 2014 y su apoyo al régimen sirio con la entrega de armas para que Al Assad bombardee a “sus propios civiles”.
Entre los individuos sancionados, que verán congelados sus activos bajo jurisdicción estadounidense, se encuentran varios oligarcas muy cercanos a Putin.
Uno de ellos es Kirill Shamalov, que se casó en 2013 con la hija menor de Putin y cuya riqueza “mejoró dramáticamente” después de la boda, de forma que en 18 meses pasó a convertirse en uno de los principales accionistas de la empresa energética rusa Sibur, que exporta petróleo y gas.
Otro de los oligarcas sancionados es Igor Rotenberg, hijo de Arkady Rotenberg, uno de los amigos de la infancia de Putin.
El Tesoro sancionó a Igor Rotenberg por haber “adquirido activos significativos” después de que Estados Unidos sancionara en 2014 a su padre, que junto a su hermano posee Stroygazmontazh (SGM Group), la mayor compañía de suministro eléctrico y construcción de oleoductos en Rusia.
Otro de los oligarcas es Oleg Deripaska, dueño del gigante del aluminio Rusal e investigado como parte de la llamada trama rusa por sus supuestos lazos con Paul Manafort, exjefe de campaña de Trump.
Por otro lado, entre los altos cargos del Gobierno ruso sancionados figuran Nikolai Patrushev, secretario del Consejo de Seguridad de Rusia; Andrey Kostin, presidente de VTB Bank, el segundo banco más grande de Rusia; así como Alexey Miller, presidente del gigante gasístico ruso Gazprom.
En una llamada con la prensa, altos funcionarios que pidieron el anonimato hicieron hincapié en que las sanciones no se dirigen contra el pueblo ruso, sino contra aquellas élites que se han “beneficiado desproporcionadamente de las malas decisiones que el Kremlin hizo para beneficiarles”.
Insistieron en que las sanciones buscan enviar un “mensaje” a Rusia y dejar claro que “sus acciones tienen consecuencias”.
Trump ha recibido numerosas críticas de miembros de su propio partido, el Republicano, por no haberse posicionado personalmente en contra de Putin, a quien alabó en numerosas ocasiones durante la campaña presidencial y con quien está tramitando una futura reunión bilateral en la Casa Blanca.
No obstante, las sanciones fueron recibidas con agrado, por ejemplo, por parte del senador republicano Marco Rubio, quien consideró que envían “un mensaje claro” a Putin.
Los sujetos sancionados salieron de la conocida como “lista Putin”, publicada en enero y en la que el Gobierno identificó, a petición del Congreso, a 96 oligarcas y 114 altos funcionarios del Kremlin que han ganado poder o riqueza gracias al mandatario ruso.
La elaboración de esa lista se hizo como parte de la conocida como ley CAATSA (siglas en inglés), aprobada por el Congreso en julio de 2017 con el objetivo de imponer sanciones a Rusia.
El pasado 15 de marzo, Estados Unidos ya impuso sanciones a cinco entidades y 19 rusos, de los que 13 habían sido imputados por el equipo del fiscal especial Robert Mueller, quien de forma independiente al Gobierno investiga los supuestos lazos entre el Kremlin y la campaña de Trump.
Según informó esta semana la cadena CNN, el equipo de Mueller está investigando si hay oligarcas rusos que donaran directa o indirectamente fondos a la campaña de Trump o a su comité de investidura.
Fuente:EFE