Wahington.- El expresidente estadounidense Barack Obama reapareció hoy en público con el compromiso de dedicarse a animar y preparar a los jóvenes para que se impliquen en política, pero sin ninguna mención o crítica para su sucesor, Donald Trump, quien se acerca a la crucial marca de los 100 días en el poder.
Después de unas largas vacaciones en lugares exóticos, dedicadas en parte a escribir un libro de memorias, Obama retomó el micrófono para dar una conferencia en su ciudad predilecta, Chicago. El primero de una serie de actos públicos que incluirán una ceremonia en mayo en Berlín junto a la canciller alemana, Angela Merkel.
"¿Qué ha pasado desde que me fui?", dijo Obama en tono de broma al comenzar el acto, una conversación con jóvenes en la Universidad de Chicago (Illinois), la misma en la que fue profesor de Derecho Constitucional durante más de una década.
Esa fue la referencia más directa de Obama a los grandes cambios que se han producido desde que cedió el Despacho Oval el pasado 20 de enero a Trump.
Dos días antes de dejar el poder, Obama prometió que alzaría su voz si consideraba que las acciones de Trump amenazaban los "valores principales" del país, algo que, hasta ahora, solo ha hecho a través de su portavoz para criticar el veto contra ciertos inmigrantes musulmanes impuesto en enero y suspendido después por un juez.
Obama no tiene previsto criticar a Trump en las apariciones públicas y privadas que tiene preparadas para los próximos meses, dado que no quiere que sus respuestas alimenten las tensiones políticas en el país, según explicaron sus asesores la semana pasada al diario The New York Times.
El expresidente está centrado, en cambio, en definir una labor después de la Presidencia que tratará en buena parte de influir en la vida política de Estados Unidos, que considera lastrada por las bajas tasas de participación electoral, la influencia desmesurada de intereses especiales, y el creciente extremismo partidista.
"Lo más importante que yo puedo hacer para ayudar en algún sentido es preparar a la próxima generación de líderes para que tomen el relevo e intenten cambiar el mundo", aseguró hoy Obama.
A través de la Fundación Obama y de su futura biblioteca presidencial, ambas en Chicago, el exmandatario espera identificar a jóvenes con talento y pasión por el trabajo comunitario y darles las herramientas que necesiten para tener éxito en ella.
"La pregunta es, ¿hay formas en las que podamos derribar algunas de las barreras que desalientan a los jóvenes de la idea de una vida de servicio a los otros? Si las hay, quiero trabajar con ellos para derribar esas barreras", subrayó Obama.
"Quiero acelerar el movimiento de esta nueva generación hacia el liderazgo. Porque si eso ocurre, creo que estaremos bien", agregó.
El político demócrata recordó que Estados Unidos "tiene una de las tasas de participación electoral más bajas de cualquier democracia", y opinó que "eso luego se traduce en una brecha entre quién nos gobierna y en qué creemos".
"Los únicos que van a poder resolver ese problema van a ser los jóvenes", sentenció.
Obama volvió la vista atrás a su propia experiencia como organizador comunitario en un barrio pobre de Chicago, con 25 años, cuando "acababa de salir de la universidad lleno de idealismo" y convencido "de que iba a cambiar el mundo".
"Soy el primero en reconocer que no prendí fuego al mundo, ni transformé estas comunidades de forma significativa. Pero la experiencia sí me cambió (...) porque me enseñó que la gente ordinaria, cuando trabaja unida, puede lograr cosas extraordinarias", agregó.
"Todos los problemas que enfrentamos hoy son graves, son abrumadores, pero no son irresolubles", subrayó.
Obama también abogó por mirar a los inmigrantes "como personas" y no "como 'un otro'" que pueda perjudicar a los estadounidenses, dado que la mayoría de los indocumentados "son solo familias que buscan un futuro mejor para sus hijos".
El exmandatario tiene previsto recibir un premio el 7 de mayo en Boston, y viajar después a Italia para dar un discurso en la Cumbre Global de Innovación Alimentaria sobre el efecto del cambio climático en las provisiones de alimentos, y a Alemania para un acto junto a Merkel el 25 de mayo en Berlín.
Fuente:Externa