La Habana.- El Gobierno cubano ha decretado nueve días de luto nacional a partir de este sábado, según ha explicado el Consejo de Estado en un breve comunicado, en el que remarca que se suspenderán “todas las actividades y espectáculos públicos, ondeará la enseña nacional a media asta en los edificios públicos y establecimientos militares, y la radio y la televisión mantendrán una programación informativa, patriótica e histórica”.
Asimismo, el Ejecutivo ha señalado que los cubanos que quieran rendirle homenaje podrán acudir a lo largo de este domingo al memorial José Martí, uno de los lugares emblemáticos de La Habana, en el lado norte de la Plaza de Revolución de la capital. Después, las cenizas de Fidel Castro recorrerán durante cuatro días la isla y los homenajes concluirán el domingo 4 de diciembre con un funeral en Santiago de Cuba, la ciudad en la que se gestó la Revolución cubana y que alberga los restos de Martí, el héroe de la independencia cubana.
Primeras reacciones en La Habana tras la muerte de Castro
El anuncio de Raúl Castro no ha tenido un eco visible inmediato en las calles de Cuba, que duerme durante las primeras horas sin el que fuera líder omnipresente durante más medio siglo de su historia reciente. “Hay una absoluta calma en la calle; es probable que la mayoría de los cubanos todavía no se hayan enterado”, ha relatado en TVE la corresponsal de la agencia Efe en La Habana, Lorena Cantó.
Por el contrario, decenas de cubanos se congregaban con banderas de su país y de Estados Unidos en el café Versailles de Miami, uno de los lugares de reunión de los exiliados que viven en Florida. La calle 8 de la ciudad, la avenida principal de la Pequeña Habana, está cortada y con la gente ocupando la calzada mientras celebra la muerte de Castro, según puede verse en las imágenes de televisión.
Últimas apariciones
Debilitado por sus problemas de salud, y en particular por una diverticulitis gástrica que le obligó a pasar por el quirófano, Fidel Castro había dejado el poder en manos de su hermano en 2006, primero temporalmente y, ya en 2008, de forma definitiva. Desde entonces, sus apariciones públicas se habían espaciado, aunque seguía estando presente en la vida política cubana, especialmente con la publicación de sus “Reflexiones” en el diario oficial Granma y en el digital Cubadebate, en el que continuaba publicando artículos esporádicamente.
Sus últimas imágenes son del pasado 15 de noviembre, cuando recibió en su residencia al presidente de Vietnam, Tran Dai Quang, si bien la última vez que se le vio en un acto público fue el pasado 13 de agosto, con motivo de la celebración de su 90 cumpleaños en el teatro Karl Marx de La Habana; en esa ocasión, se vio a Castro con un aspecto frágil, vestido con un chándal blanco y flanqueado por su hermano Raúl y el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Se cumplen diez años desde que Fidel Castro abandonara el poder
Desde entonces, había recibido también en su domicilio a otros mandatarios como el presidente de Irán, Hasán Rohaní; el de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa; o los primeros ministros de Japón, Shinzo Abe; de China, Li Keqiang, y Argelia, Abdelmalek Sellal.
Con todo, su aparición reciente más significativa tuvo lugar en, durante el XVII Congreso del Partido Comunista de Cuba, en el que pronunció un discurso que sonó a despedida y que reivindicaba la vigencia de las ideas comunistas: “A todos nos llegará nuestro turno, pero quedarán las ideas de los comunistas cubanos, como prueba de que en este planeta si se trabaja con fervor y dignidad, se pueden producir los bienes materiales y culturales que los seres humanos necesitan, y debemos luchar sin tregua para obtenerlos”.
Reacciones internacionales
Como corresponde a la muerte de una de las principales figuras políticas del siglo XX, la muerte de Fidel Castro ha suscitado numerosas reacciones de líderes mundiales, si bien no consta aún una reacción oficial desde el gran rival geopolítico de la Cuba castrista, Estados Unidos. Uno de los primeros en mostrar sus condolencias ha sido el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que ha instado a través de Twitter “a todos los revolucionarios del mundo” a continuar con su legado: “A 60 años de la partida del Granma de México parte Fidel hacia la Inmortalidad de los que luchan toda la Vida… Hasta la Victoria Siempre”, ha recordado Maduro.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, ha lamentado asimismo la muerte de Castro, al que ha calificado de “referente emblemático del siglo XX” y de “gran amigo de México”. También a través de la red social se ha pronunciado el presidente de Ecuador, Rafael Correa: “Se fue un grande. Murió Fidel. ¡Viva Cuba! ¡Viva América Latina!”.
Más comedido se ha mostrado el presidente de Francia, François Hollande, al señalar que Castro “encarnó la Revolución cubana, con las esperanzas que suscitó y las desilusiones que provocó”. El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha trasladado su pésame al pueblo cubano y y ha calificado a Fidel como “una figura de calado histórico”.
El último presidente de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, ha recalcado que Castro “resistió y fortaleció a su país durante el bloqueo más duro, cuando había una presión monumental contra él, y pudo llevar a su país por la vía del desarrollo independiente”. A su vez, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha destacado que fue “un estadista de mérito, el símbolo de una época de la Historia moderna del mundo”.
Fuente:Externa