Londres.- Las expectativas de inflación a largo plazo de la zona euro retrocedieron a mínimos récord el jueves, lo que generó apuestas de un mayor estímulo monetario por parte del Banco Central Europeo y llevó a los rendimientos de los bonos de los principales países del bloque monetario a mínimos cercanos a los 10 meses.
La caída de los precios del petróleo ha ayudado a reducir las expectativas inflacionarias y analistas dicen que es preocupante el hecho de que estas se mantengan bajas pese a que el crudo muestre señales de una recuperación.
Los futuros a cinco años de la tasa implícita de la zona euro, dato seguido de cerca por el BCE y que mide dónde espera el mercado que estén en el 2021 las expectativas inflacionarias para el 2026, tocó un mínimo récord de 1,38 por ciento.
Dicha medición ha caído alrededor de 30 puntos básicos desde el inicio del año, después de que el desplome en los precios del petróleo y las preocupaciones sobre la economía de China generaron un retroceso en las expectativas inflacionarias.
El crudo cayó hasta un 3 por ciento el jueves, resaltando la tarea que enfrenta el BCE en llevar la inflación de vuelta a su objetivo de justo por debajo del 2 por ciento.
Los precios al consumidor en la zona euro subieron un 0,3 por ciento interanual en enero, mostraron el jueves datos de la oficina de estadísticas de la Unión Europea tras rebajar su estimación previa de un 0,4 por ciento.
"Estamos abiertos a la visión de que el BCE podría hacer más en (su reunión de) marzo porque la correlación entre petróleo e inflación se ha debilitado", dijo el estratega de Commerzbank Rainer Guntermann.
"Cuando el petróleo cae la tendencia de expectativas de inflación son más bajas, pero en días donde el crudo se dispara, como ayer (miércoles), las expectativas inflacionarias siguen tendiendo a ser bajas y esto sería preocupante para el BCE, ya que sugiere que podrían estar en juego factores subyacentes adicionales", agregó.
Se espera ampliamente que el BCE recorte su tasa de depósito en 10 puntos básicos a -0,4 por ciento en su reunión del 10 de marzo y economistas consultados por Reuters dijeron que el tamaño del esquema de compra de bonos del organismo podría ampliarse en entre 10.000 y 30.000 millones de euros al mes.
Las compras mensuales hasta ahora abarcan los 60.000 millones de euros.
Fuente:Reuters
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