Epstein, de 66 años, fue encontrado muerto en su celda en el Metropolitan Correctional Center de la ciudad de Nueva York el pasado 10 de agosto, lo que provocó una oleada de indignación, incredulidad y sospecha sobre la seguridad de un prisionero de tan alto perfil, conocido por socializar con políticos y empresarios poderosas, incluidos el presidente Donald Trump y el expresidente Bill Clinton.
El Departamento de Prisiones insistió en que Epstein aparentemente se había suicidado, pero esta declaración no acalló las teorías de conspiración sobre su muerte.
Epstein, quien había sido acusado de violar a niñas menores de edad durante varios años, estaba bajo vigilancia y seguimiento por intentos de suicidio después de que fuera hallado en el piso de su celda con moretones en el cuello el pasado 23 de julio.
Sin embargo, los funcionarios del sistema penitenciario, revelaron que los guardias suspendieron la vigilancia después de aproximadamente una semana, así que Epstein fue trasladado a una celda de alta seguridad. La vigilancia no la máxima, según los funcionarios, pero, aun así, era supervisado cada 30 minutos.
El Procurador General William Barr reveló en días recientes que los investigadores han descubierto "graves irregularidades" en la cárcel. El FBI y el inspector general del Departamento de Justicia investigan las circunstancias de su deceso.
Los investigadores sospechan que los oficiales carcelarios que estaban de guardia la noche de la muerte de Epstein falsificaron las entradas del registro para demostrar que sí cumplieron con el protocolo de vigilar a los reclusos cada media hora, según fuentes familiarizadas con el caso y citadas por la AP.
La sobrecarga de trabajo habría sido un factor en la deficiencia de vigilancia. Un guardia en la unidad de Epstein había trabajado un quinto día consecutivo y otro también había trabajado horas extras obligatorias, según la pesquisa.
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Estos guardias hablaron bajo condición de anonimato con la AP porque no están autorizados para discutir públicamente la investigación.
El juez de distrito de los Estados Unidos, Richard Berman, quien está a cargo de la causa penal contra Epstein, le exigió respuesta esta semana al director de la cárcel y escribió en una misiva el lunes que "(las causas que rodearon la muerte) no se explicaron detalladamente".
El director respondió argumento que el complejo carcelario completó una investigación interna, pero que no podía proporcionar información porque los hallazgos se habían incorporado a la investigación de los federales.
The Washington Post y The New York Times informaron el jueves que la autopsia reveló que varios huesos del cuello de Epstein se habían roto, lo que llevó a especular que su muerte fue un homicidio.
La médico forense en jefe, Barbara Sampson, emitió una declaración el jueves en respuesta a esos artículos.
"En todas las investigaciones forenses, toda la información debe sintetizarse para determinar la causa y la forma de la muerte. Todo debe ser consistente, no puede evaluar un solo hallazgo”, dijo Sampson.
Fuente:Telemundo
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