Nueva York.- El juicio contra la niñera Yoselyn Ortega, acusada de presuntamente asesinar a los dos niños que cuidaba, Lucía Krim, de 6 años, y Leo, de 2, continúa por segunda semana y este lunes le tocó testificado al conserje del edificio del Upper West Side, quien fue el primero que vio la sangrienta escena.
El hombre aseguró que después de haber visto los cuerpos sin vida de los niños en el baño del apartamento donde fueron asesinados, descubrió que la niñera, de origen dominicano y de 55 años, estaba herida por una puñalada que se propinó ella misma. Además, dijo que en ese momento la mujer lo miraba fijamente con “ojos de diablo”.
El detective Bradley Gore también fue uno de los primeros que llegó a la escena, y también declaró el lunes que justo cuando entró en el apartamento, el conserje le dijo: “Sea lo que sea es el diablo”.
Otros de los que testificó fue el detective Soeren Lygum quien recordó que intentó proporcionar asistencia médica a los niños aunque estos no tenían pulso.”Consideramos que tienes que intentar todo lo que sea humanamente posible”, dijo Lygum, quien se fue con los paramédicos al hospital.
A algunos de esos paramédicos también le toco subir al estrado, como Kevin Orr, quien declaró: “Problablemente esta ha sido la escena más espantosa que haya visto en mis 27 años de profesión”.
El jurado se mostró afectado, intentando no llorar y cubriendo sus rostros cuando la parte acusadora presentó como pruebas fotos de la escena, incluyendo fotografías de los cadáveres de los hermanos dentro de la bañera. “La bañera estaba prácticamente llena de sangre”, recordó el detective Orr. Su compañero, Eugene Nicholas, añadió: “Es la peor escena del crimen que he visto además del 9/11”.
El viernes pasado, al concluir la primera semana del juicio contra Ortega, la madre de los niños, Marina Krim, finalizó los dos días de su doloroso testimonio. Krim volvió a atacar verbalmente a la acusada de matar a sus dos hijos, gritándole: “¡Eres malvada! ¡Eres malvada! ¡Por favor, sáquenme fuera de aquí!”, mientras abandonaba la sala de juicios con un ataque de ira y angustia.
Los abogados defensores están utilizando argumentos que han sido calificados de absurdos. Han sugerido que Ortega cometió este acto tan atroz porque estaba celosa de Krim y enfadada por asuntos relacionados con su trabajo en la casa.
Los miembros del jurado escucharon el viernes los testimonios del portero y del guardia de seguridad que estaban trabajando el día del asesinato en el edificio donde se encuentra el apartamento de la familia Krim.
El guardia, Thomas Brown, declaró que recordaba que Ortega, quien nunca antes le había hablado, le preguntó si Krim estaba arriba antes de llevar a los niños al apartamento y matarlos en el baño. En ese momento, Krim estaba con Nessie, la mayor de sus tres hijos, en una clase de baile cercana a su domicilio con la intención de recoger a Lulu. Pero volvió frenéticamente a su casa cuando comprobó que esta no estaba allí.
El jurado escuchó además la llamada al 911 que hizo el portero Glen Loby, en la que se oían los gritos desesperados de Krim de fondo tras descubrir el fatídico asesinato de sus dos hijos. Ortega podría enfrentar cadena perpetua.
Fuente:Externa
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