San Francisco de Macorís, República Dominicana.- En medio de una sentida manifestación de duelo, fueron sepultados este lunes los restos de cinco jóvenes que murieron al estrellarse el vehículo en que viajaban la madrugada de este domingo en la carretera principal del distrito municipal Ranchito, de La Vega.
Las víctimas son Emil Suárez Ledesma, de 17 años; Miguel Ángel de la Cruz,. de 17; Nabil Piña Cabrera, 16; Luis de Jesús Almonor, de 17 y Camil Rodríguez Hernández, de 16.
Los cinco fueron velados en uno de los salones del colegio La Altagracia, de San Francisco de Macorís, donde estudiaban. Posteriormente sus cadáveres fueron inhumados en el cementario municipal de aquí. Un quinto fue ssepultado en la ciudad de Pimentel.
Este lunes antes del sepelio fue oficiada una misa de cuerpo presente en la catedral Santa Ana, por el eterno descanso del alma de Luis Jesús. Camil Francisco, Emil (los tres de 15 años) y Miguel Ángel
A Navil Piña de la Rosa, de 16 años, que también fue expuesto en el colegio el domingo, le realizaron una misa de cuerpo presente en Pimentel, municipio también de la provincia Duarte.
Hijos de personas prominentes
Todos eran oriundos de San Francisco de Macorís, hijos de personas prominentes de esta localidad.
El grupo viajaba en un Toyota Corolla, negro, que se estrelló contra una caseta y una banca de lotería.
En las últimas horas ha circulado profusamente en las redes sociales un video que los jóvenes se tomaron antes del accidente en el que, a manera de chiste, uno de ellos decía: «Si aquí morimos, los quiero chicos!!».
En la grabación, que enviaron a uno de sus amigos, se aprecia que los muchachos estaban borrachos y fumaban .
Estuvieron en un cumpleaños
Familiares de algunas de las víctimas dicen que el sábado, horas antes de la tragedia, los muchachos estaban en una fiesta de cumpleaños. Uno de ellos tomó las llave de un vehículo de su padre y salió en pijama a buscar a los demás, quienes también salieron sin permiso.
Mensajes por whatsAap
Uno de ellos escribió a un amigo por WhatsAap : “Viejo, fuimos casi llegando a la capital y nos devolvimos; Miguel está loco… la curva a 180, y ahora vamos a La Vega y compramos más bebidas. Muchachos los quiero, si hoy me muero”.
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