San Cristóbal.- El traslado al Palacio de Justicia de San Cristóbal de Julio Alberto Cabrera Jiménez (Jack el Destripador), condenado a 30 años por violar a seis mujeres, a tres de la cuales asesinó, provocó llanto e indignación entre muchos de los parientes de las víctimas.
Muchas lloraron mientras que otros trataron de golpear al hombre que calificaron “como un monstruo” y que hoy trata de obtener su libertad al haber cumplido la mitad de la pena impuesta.
Más temprano, un grupo de personas, entre ellas dirigentes comunitarios, se manifestaron frente al Palacio de Justicia de esta ciudad sureña en contra de que se le otorgue la liberad.
Los manifestantes insisten en que Cabrera Jiménez no puede ser dejado libre por la magnitud de sus crímenes.
También argumentan que de ser dejado en libertad, el sentenciado podría continuar cometiendo asesinatos porque no muestra señal de arrepentimiento.
Fue sentenciado por violar y asesinar a María Mercedes Doñé Brito, de 21 años, Mireya García de la Rosa, de 29, y Brenny Alnaica Féliz Cuello, de 20.
Asimismo, de herir con armas blancas , después de violarlas, a Gensys Georgina Hernández Cuevas, María Inmaculada Meregildo Duaerte y Virginia de la Cruz Pérez.
Fuente:DL
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