Un grupo de estados, ciudades, empresas y universidades de Estados Unidos afirmaron el sábado que siguen comprometidos con el combate contra el calentamiento global, a pesar de que el gobierno de Donald Trump decidió abandonar el Acuerdo de París sobre el cambio climático.
Sin embargo, la alianza _que en conjunto supone una economía mayor de la de Japón y Alemania juntas_ afirmó que no podrá lograr el recorte necesario en emisiones de gases de efecto invernadero sin algunos esfuerzos a nivel federal.
“Es importante que el mundo sepa que el gobierno estadounidense puede que se haya retirado del Acuerdo de París, pero el pueblo estadounidense está comprometido con sus objetivos y no hay nada que Washington pueda hacer para detenernos”, dijo el exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, durante una conferencia climática global en Bonn, Alemania.
“Los ciudadanos, estados y empresas de Estados Unidos siguen comprometidos con el acuerdo de París”, agregó.
El gobernador de California, Jerry Brown, se hizo eco de esos comentarios.
“En Estados Unidos tenemos un sistema federal y los estados tienen poder real, al igual que las ciudades. Cuando las ciudades y los estados se combinan y luego se unen con empresas poderosas, logramos hacer cosas”, dijo.
Su discurso fue interrumpido brevemente por manifestantes en contra del uso del carbón y contra la fracturación hidráulica (una técnica para extraer hidrocarburos de las rocas subterráneas, llamada “fracking” en inglés), quienes levantaron pancartas y gritaron: “¡Todavía estamos dentro! ¡Trump sigue fuera!”
El grupo, que se hace llamar “America’s Pledge” (“La promesa de Estados Unidos”), dijo que los estados, ciudades y grupos privados que lo integran han tomado medidas considerables para reducir sus emisiones de efecto invernadero al fomentar el uso de energías renovables y sistemas de transporte respetuosos con el medio ambiente.
No obstante, el grupo dijo en un informe: “no podemos subrayar con suficiente fuerza la naturaleza crítica del compromiso federal para lograr los objetivos de descarbonización profunda que Estados Unidos debe cumplir después de 2025”.
Daniel Firger, uno de los colaboradores del informe, dijo que su intención era mostrar que muchos en Estados Unidos no están dispuestos a esperar a que Trump cambie de opinión sobre el cambio climático o a que el próximo presidente aborde el tema.
“La buena noticia en torno al anuncio de Trump de retirarse es que ha causado una oleada de rechazo desde todos los rincones de la economía estadounidense”, dijo Firger a The Associated Press.
Fuente:AP
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