El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, lanzó el viernes el grito para conmemorar los 207 años del inicio de la gesta independentista, un acto en el que el mandatario hizo referencia a la "solidaridad" del pueblo con los estados afectados por el terremoto que golpeó el país el pasado 7 de septiembre.
Esta fue la quinta y penúltima ocasión en que el tradicional Grito de Independencia fue encabezado por Peña Nieto, dado que el 1 de diciembre de 2018 finaliza su mandato de seis años.
Acompañado de su esposa, Angélica Rivera, Peña Nieto apareció a las 23.00 hora local (04.00 GMT del sábado) en el balcón central del Palacio Nacional, sede del Ejecutivo, que mira a la Plaza de la Constitución, conocida como el Zócalo.
Lo hizo pocas horas después de visitar el estado sureño de Chiapas, uno de los más golpeados por el movimiento telúrico de magnitud 8,2 en la escala de Richter que hasta el momento ha dejado 98 muertos.
Portando la bandera nacional, el mandatario lanzó vivas a los héroes de la independencia mexicana, entre los cuales incluyó un "viva la solidaridad a los mexicanos con Chiapas y Oaxaca", en referencia a estos dos estados, que acumulan 16 y 78 víctimas mortales, respectivamente.
Tras ello, repitió tres veces el grito de "¡Viva México!", coreado por decenas de miles de personas congregadas en la plaza.
La ceremonia, que se repite cada año, evoca la arenga lanzada la madrugada del 16 de septiembre de 1810 por el cura Miguel Hidalgo, quien llamó a los mexicanos a sublevarse contra la autoridad virreinal de la Nueva España. La independencia fue consumada en 1821.
A la aparición del presidente siguió el también tradicional despliegue de fuegos artificiales en la plaza.
Actos parecidos se desarrollaron en los 31 estados del país, encabezados por los respectivos gobernadores.
Los festejos continuarán mañana con un desfile militar en el Zócalo.
Debido a la conmoción que vive el país por el sismo, la ceremonia del grito no vendrá seguida por la habitual cena de gala en Palacio Nacional a la que asisten invitados especiales.
La Presidencia de la República informó esta semana que Peña Nieto dispuso no realizar la cena porque "dedica su atención a coordinar y evaluar las acciones para auxiliar a la población damnificada".
Hace dos años, el mandatario también canceló la cena, a la que asisten invitados especiales, por motivos de austeridad.
Fuente:EFE
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