Nueva York.- Las fuerzas de la ley dictaminaron el viernes que la muerte de un pequeño hispano de 2 años se investiga como un homicidio. Su niñera, de 24 años, fue arrestada en relación con el caso.
Lorena Iraheta cuidaba el pasado 5 de abril de Jason Alvarado en su casa de Queensboro Hill, en el 59-34 de la calle 163, cuando el niño comenzó a tener problemas para respirar poco después de la medianoche.
Jason fue trasladado de urgencia al Cohen Children’s Medical Center, donde murió seis días después. Los investigadores creen que la muerte del niño fue un caso de síndrome del bebé sacudido.
“Unos días antes el niño no quería ir, pero nosotros pensábamos que tal vez era un capricho de él (…) pero nosotros lo llevamos”, expresó el padre del menor.
“Es un dolor infinito que siente uno, con este pedacito de ser que nos arrancaron de nuestras entrañas”, añadió.
El infante se sometió a una cirugía cerebral, pero los médico no lograron salvarlo. Un cirujano declaró a los investigadores que Jason sufrió lesiones graves, como hinchazón cerebral y hemorragias retinianas, según la denuncia penal.
Iraheta le dijo a la madre que Jason "se había desmayado", según los documentos judiciales. Días después, la niñera admitió a los investigadores "se frustró" cuando Jason se durmió en su casa, por lo que "lo levantó por las axilas y lo sacudió de un lado a otro para mantenerlo despierto".
Iraheta fue arrestada el 7 de mayo y está acusada de homicidio involuntario, homicidio por negligencia, agresión agravada y poner en peligro a un niño.
La mujer podría enfrentar cargos más graves.
Fuente:Telemundo
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