Santo Domingo.-Los abonos para las notables diferencias de resultados socializados por más de diez firmas encuestadoras con relación al mercado electoral, especialmente en lo relativo a los precandidatos presidenciales, ha llevado confusión e incertidumbre a una población que por primera vez se enfrenta a un proceso de celebración de manera simultánea de primarias abiertas y primarias cerradas organizadas por la Junta Central Electoral.
Esa guerra de encuestas, con presentación de resultados tan disímiles, también se da cuando por primera vez las empresas que hacen estudios de mercado electoral están reguladas por la Junta, atendiendo disposición de la Ley de Partidos.
Las firmas encuestadoras tienen que estar certificadas por la Junta y deben identificar la persona o empresa que las contrata.
Sin embargo, cada una de esas encuestas da resultados distintos, aunque las mediciones se aproximen en el tiempo y lo que se está midiendo es el mismo mercado electoral.
Entonces viene la pregunta de cómo es posible ese fenómeno, si las encuestas se nutren de las estadísticas y estas se aproximan a la exactitud de las matemáticas.
Las firmas
Entre las firmas encuestadoras que han salido a relucir en este proceso y que han presentado resultados distintos, especialmente cuando miden a los precandidatos presidenciales del Partido de la Liberación Dominicana Leonel Fernández y Gonzalo Castillo están Asisa, Sigma Dos, CID Latinoamericana, Polnav, Polimetrics, ABC, Mercanálisis-CPI, Consultores Estratégicos de Marketing, Berland y la Mark Penn.
Mercadólogos
Los mercadólogos Jonathán Cabrera y Pablo Ulloa explican que la diferencias mostradas por esas firmas puede ser por la metodología utilizada, ya que para dar resultados de los partidos en particular tienen que segmentar la muestra global, lo cual reduce la muestra real que sirve para cada partido y por tanto mide cosas distintas y a su vez aumenta el margen de error.
“Pueden incidir varios aspectos, desde el diseño de la muestra, puntos de recolección de la muestra en el campo, el sesgo muestral, si se diseña el cuestionario hecho procurando un sesgo en la respuesta.
Sin embargo, hoy te puedo decir que lo que está sucediendo en muchas de las encuestas es que cuando presentan los resultados lo hacen en base al universo de la muestra y hay variables que se deben cruzar y que al hacerlo su muestra (N) es menor y te da un resultado real”, indicó Cabrera.
Las muestras
Explica que cuando se mide el mercado electoral en el país se suele tomar una muestra de alrededor de 1,200 personas y que hay preguntas que van dirigidas a la totalidad de la muestra, como por ejemplo el partido de preferencia.
Señala que entonces cuando se le pregunta a las 1,200 personas cuáles son los candidatos de un partido en particular entonces los resultados serían distintos, si se toma el universo de la muestra o si solo se consideran los que dijeron simpatizar por el partido al que pertenecen los precandidatos.
Por ejemplo, si de la muestra de 1,200 dijeron que simpatizan por un partido 800 personas, entonces si se mide entre esos 800 las intenciones de voto de los precandidatos de ese partido se tendrá un resultado más cercano a la realidad, aunque el margen de error aumenta, ya que la muestra efectiva se ha reducido.
Pero si esos precandidatos de ese partido se miden a partir de los 1,200 muestras, podría dar un resultado distinto, ya que se está contaminando con las respuestas de los 400 que dijeron simpatizar por un partido distinto.
En el caso de esos 400 que dijeron simpatizar por un segundo partido, el margen de error aumentaría mucho más porque la muestra se estaría reduciendo a una tercera parte.
Por su parte Pablo Ulloa coincide en la explicación al señalar que aunque se tome la muestra representativa y estadísticamente correcta, cuando se hacen los subconjuntos de variables, entonces aumenta el margen de error.
En definitiva, las diferencias estadísticas entre los resultados presentados por las firmas encuestadoras pueden estar variando entre ellas porque al medir la intención de votos de los encuestados están utilizando universos distintos.
Mientras que unas segmentan a los encuestados que dijeron que votarían por un partido en particular para medir la intención de votos de los precandidatos de ese partido, otras firmas están utilizando las opiniones del universo (incluyendo los que dijeron que votarían por otro partido) para hacer las mediciones.
Cruzar las variables
Tanto Cabrera como Ulloa aseguran que todas esas informaciones están contenidas en las matrices de las encuestas y que solo hay que hacer los cruces de las variables para auscultar los resultados reales de lo que se quiera saber.
Sin embargo, no se puede perder de vista que en tiempo de campañas electorales las encuestas se convierten también en instrumentos propagandísticos y por lo tanto las firmas encuestadoras presentan al público los cruces de información que tengan resultados convenientes para sus clientes, sin que necesariamente impliquen que sean falsos.
¿Cómo explica que encuestas den resultados diferentes de la misma realidad?
Todo dependerá de las preguntas que se realizan.
Algunas están orientadas a la simpatía o afiliación partidaria, de donde después a estos, según su afiliación, se les pregunta por cuál candidato votarían, por lo que se reflejan altos porcentajes de los candidatos dentro de su partido.
Pero si de la muestra total se les realiza la misma pregunta, por cuál candidato votarían, presentando todos los aspirantes que participarén en las primarias, independientemente del partido al que pertenezcan, estos porcentajes disminuyen y aumenta la proporción de encuestados que dice no saber o que no votaría.
Otro factor que afecta estos resultados es la seguridad de asistir a votar; algunas encuestadoras presentan los resultados de los candidatos en base a la intención de asistir a votar en las primarias, es decir, qué tan probable es que asistan a votar.
Otra variación en los resultados es debido a las opciones de candidatos que se les presenta a los encuestados, si del PRM o del PLD solo me presentas a los dos candidatos punteros, y el encuestado no simpatiza ni votaría por ninguno de ellos, este elige la opción de ninguno o no votaría.
Fuente:El Dia
No hay comentarios.:
Publicar un comentario