México: Con devoción le cantan a la madre morena, porque su enorme dolor se suma la incertidumbre. La duda de no saber si sus seres queridos podrán o no contarles la pesadilla que protagonizaron cuando se accidentó el autobús en el que viajaban.
"No sabemos a ciencia cierta quién falleció y quién no, están identificando los cuerpos todavía", dice Alejandro Cruz, familiar de varios de los peregrinos que murieron el miércoles cuando el autobús en que viajaban chocó contra un tráiler y se incendió.
Cruz perdió a su madre, a su hermana y dos familiares más, pero aún no sabe nada de otros seres queridos. Por eso sigue junto a todos los que sienten que su corazón se altera cada vez que los sobrevivientes salen del hospital.
"Solamente hay dos, no, tres pacientes que están en terapia intensiva, recibiendo tratamiento de alta especialidad", explica Roberto Ramos, secretario de Salud del estado de Veracruz.
Y los que no ubicaron a los suyos en las listas de heridos, permanecen afuera del forense de Veracruz, impacientes porque saben que la identificación de los restos será lenta, y solo entonces podrán iniciar su luto.
"Que no nos pusieran tantas trabas porque tenemos que trasladar a nuestros seres queridos a Chiapas porque allá también nuestros familiares nos esperan", expresa uno de los deudos.
En Tuxtla Gutiérrez, con toda la fe que llevan en su corazón, rezan por las almas de quienes empredieron su camino hacia el cielo y ruegan por la salud de aquellos que luchan para que sanen sus heridas.
De manera oficial se ha confirmado que todas las personas que viajaban en el camión accidentado eran de Chiapas y volvían a sus hogares luego de realizar una peregrinación a diversos templos católicos.
A través de las redes sociales, los feligreses compartieron su visita a San Juan de los Lagos, en estado de Jalisco, y a la Basílica de Guadalupe, en la capital mexicana.
Esas imágenes son ahora el único recuerdo para quienes lloran por esta desgracia.
Fuente:Telemundo
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