Ciudad del Vaticano.- El Papa emérito Benedicto XVI reconoció que le ha ido mejor como maestro que como líder, al revelar en un nuevo libro que a veces tuvo dificultades para tomar decisiones durante su tiempo a cargo de El Vaticano.
No obstante, el religioso de 89 años dijo en una entrevista que no consideraba un fracaso sus ocho años a la cabeza de los 1.200 millones de católicos alrededor del mundo.
Al renunciar a su pontificado en 2013, Benedicto se convirtió en el primer pontífice en más de 600 años en dejar el máximo cargo de la Iglesia Católica.
En extractos de su nuevo libro que fueron publicados el jueves por el diario italiano Corriere della Sera, Benedicto dijo que no se sentía cómodo asumiendo un rol de liderazgo.
"Uno de mis puntos débiles es quizás la falta de resolución al gobernar y tomar decisiones. En realidad soy más un maestro, una persona que reflexiona y medita sobre aspectos espirituales", dijo Benedicto en el libro "The Last Conversations" (Las últimas conversaciones), del periodista alemán Peter Seewald.
"Un gobierno práctico no es mi punto fuerte y eso es definitivamente una debilidad. Pero no puedo verme a mí mismo como un fracaso", agregó.
Benedicto describió algunos momentos difíciles de su pontificado, entre ellos los múltiples casos de abusos sexuales sufridos por niños por parte de sacerdotes, por los que fue acusado de no hacer lo suficiente para detenerlos, y por levantar la excomunión a un obispo que negó el Holocausto.
También mencionó el caso "Vatileaks", en el que su mayordomo filtró documentos que revelaron una trama de corrupción al interior del Vaticano, aunque dijo que en general su papado tuvo aspectos positivos.
Fuente:Reuters
No hay comentarios.:
Publicar un comentario